4 alternativas para la implantación efectiva de la flexibilidad laboral en tu empresa

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4 alternativas para la implantación efectiva de la flexibilidad laboral en tu empresa

No cabe duda de que el desarrollo de las nuevas tecnologías, así como la aparición de profesiones y oportunidades de negocio innovadoras y diferentes, está dando lugar a una más que considerable ruptura de los parámetros que, tradicionalmente, han caracterizado el ámbito empresarial y comercial, dando lugar a una más que reseñable tendencia hacia una mayor flexibilidad laboral.

Si bien, hasta hace tan solo unos años, el hecho de desarrollar la actividad profesional en un centro de trabajo suponía, por sí solo, un síntoma de implicación y dedicación a la empresa, además de servir como mecanismo para el control del desempeño por parte de los mandos intermedios, en la actualidad todos estos aspectos están derivando hacia un mayor interés y seguimiento sobre los resultados, pasando a primar los aspectos cualitativos de la jornada de trabajo, como es la consecución de los objetivos programados, sobre elementos con un carácter más cuantitativo, relacionados simplemente con la duración efectiva de la jornada laboral.

Por eso, desde OGE Consultores hoy queremos centrar nuestra atención en mostrarte las distintas alternativas que puedes poner en práctica en tu empresa para conseguir una implantación efectiva de la flexibilidad laboral en tu negocio, con el fin de que reflexiones detenidamente sobre su capacidad de incorporación para mejorar la implicación de tus trabajadores, a partir de la adaptación a sus condicionantes individuales y la búsqueda de un mayor fomento de su conciliación a nivel personal.

 

Flexibilidad laboral en cuanto a horarios

 

Como primera medida para contribuir a un incremento de la flexibilidad laboral en la empresa, se puede estudiar la posibilidad de que cada trabajador pueda organizar su jornada laboral, partiendo de una duración homogénea, en cuanto a su horario de entrada o salida, o del tiempo dedicado a los descansos intermedios.

Esta medida, a simple vista bastante básica, suele ser muy valorada por aquellas personas que tienen hijos, u otras responsabilidades familiares, y que requieren de una cierta adaptación horaria para poder acompañar a sus pequeños al colegio, o que prefieren concentrar su jornada y salir antes, para disfrutar de un mayor tiempo con ellos.

 

Concentración de las horas de trabajo semanales o mensuales

 

Se trata de una variante de la alternativa anterior, en la que la unidad de medida para establecer la flexibilidad laboral no se limita a la jornada diaria, sino a la disposición irregular de las cargas de trabajo en términos semanales o mensuales.

Así, un miembro del equipo de trabajo puede preferir prolongar sus jornadas laborales durante aquellos días en los que las cargas de trabajo sean más elevadas, para disponer de unas jornadas menos exigentes durante los periodos en los que la demanda sea inferior.

Aunque puede parecer un sistema bastante confuso y difícil de gestionar, es preciso tener presente que lleva años funcionando con éxito en empresas relacionadas con el comercio o la hostelería, o en servicios como la seguridad o la salud, sobre todo en lo que se refiere al desarrollo de guardias.

 

Sustitución de jornadas laborales por días de descanso

 

A partir de las medidas anteriores se puede llegar a un acuerdo entre empresa y sus recursos humanos para fomentar el intercambio de las horas extra trabajadas durante aquellos periodos en los que sea necesario, por días de descanso remunerados a disposición del trabajador, garantizando su libre aprovechamiento a lo largo del año.

 

Flexibilidad laboral basada en el teletrabajo

 

Esta medida de flexibilidad laboral, cada vez más frecuente en empresas dedicadas al sector servicios en las que el contacto con el cliente no es estrictamente presencial, y muy especialmente como consecuencia de los efectos de la pandemia de Covid-19 en nuestro tejido empresarial, se basa en otorgar a los recursos humanos de la empresa, o al menos a aquellos departamentos en los que sea posible, la opción de desarrollar su jornada laboral, total o parcialmente, de una forma remota, es decir, desde el lugar que consideren más adecuado para garantizar su concentración y productividad.

Aunque a simple vista puede parecer una medida que únicamente ofrece beneficios al trabajador, ya que le otorga una mayor libertad y un considerable ahorro en costes económicos y de tiempo, al reducir sus desplazamientos, también supone beneficios para la empresa al permitirle disminuir sus costes fijos de estructura, dada la menor necesidad de contar con unas instalaciones que permitan albergar a toda la plantilla de forma simultánea durante el desarrollo de su jornada de trabajo.