Trucos para exprimir al máximo la gestión del tiempo

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Trucos para exprimir al máximo la gestión del tiempo

Tanto si acabas de poner en marcha un nuevo proyecto empresarial como si llevas varios años dedicando tus días y, por qué no decirlo, algunas de tus noches a la consecución óptima de tus objetivos de negocio, habrás podido comprobar, desde el primer instante, lo importante que es para el futuro de tu negocio saber gestionar tu tiempo de una forma eficiente.

No en vano, el hecho de exprimir al máximo tus horas de trabajo es un factor esencial para incrementar, casi sin darte cuenta, la productividad de tu negocio, además de contribuir a aspectos tan importantes como mejorar tu conciliación personal o familiar, favorecer tus relaciones sociales o conseguir algo tan simple, y a la vez tan complicado, como permitirte una mayor calidad de tu descanso.

Por este motivo, desde OGE Consultores hoy queremos detenernos en repasar contigo algunas de las claves que pueden ayudarte a dejar de ser esclavo de tu tiempo para convertirte, de una forma mucho más sencilla de lo que crees, en el dueño de tu jornada laboral y, por tanto, de tu destino profesional:

  • Para comenzar, será esencial tener claros cuáles son tus objetivos profesionales y los pasos necesarios para llevarlos a cabo. Aunque pueda parecer una obviedad, te sorprendería tomar conciencia de la cantidad de tareas que realizamos a lo largo del día sin tener fijado previamente un rumbo fijo.

 

  • Una vez hayas definido este primer aspecto, el siguiente paso deberá consistir en establecer prioridades, considerando aquello que es urgente, pero, al mismo tiempo, teniendo siempre presente lo que realmente es importante para el futuro de tu negocio y de los proyectos que tienes en marcha.

 

  • Cuantifica en horas el tiempo necesario para la realización con éxito, y conforme a unos adecuados estándares de calidad, que requiere cada una de las tareas definidas en los puntos anteriores.

 

  • Establece un cierto periodo de holgura en la cuantificación temporal de las tareas consideradas, ya que todo es siempre mucho más fácil e idílico sobre el papel.

 

  • Realiza una calendarización de tu jornada laboral o, mejor aún, semanal. Si esto lo acompañas de un calendario mensual en el que tengas marcadas aquellos hitos importantes a los que tendrás que hacer frente a medio y largo plazo, estarás sentando las bases para alcanzar tus metas.

 

  • Para finalizar, comprométete contigo mismo a respetar la organización temporal que has plasmado a partir de las premisas anteriores. Si no estableces el firme compromiso de cumplir con tu calendarización de tareas, no solo no conseguirás tomar el mando de tu tiempo, sino que las horas dedicadas a ello habrán sido, paradójicamente, una enorme pérdida de tiempo.