¿Cómo puede ayudarte el Factoring a garantizar la liquidez y solvencia de tu negocio?

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¿Cómo puede ayudarte el Factoring a garantizar la liquidez y solvencia de tu negocio?

Una vez que hayas conseguido alcanzar un volumen de negocio que te permita disponer de una mayor estabilidad a nivel profesional, en relación a la capacidad de consolidación y éxito de tu proyecto de negocio, no cabe duda que la mayor parte de tus preocupaciones estarán relacionadas con garantizar el cobro correcto y en plazo de tus ventas o trabajos realizados.

Reducir la incertidumbre en cuanto al cobro regular de tus facturas y poder ajustar la entrada de recursos económicos para hacer frente a tus obligaciones de pago es un elemento fundamental para poder garantizar la solvencia económica de tu negocio.

No obstante, en numerosas ocasiones no disponemos de la capacidad de conseguir acelerar los procesos de pago todo lo que nos gustaría, y tenemos que adaptarnos a periodos prolongados de espera, sobre todo en el caso de nuestra relación con aquellos clientes que consideramos estratégicos para el futuro de nuestra empresa.

En base a todo ello, hoy queremos hablarte de las posibilidades que te ofrece el factoring para solucionar este problema, y sobre cómo puede ayudarte a garantizar la liquidez de tu negocio en todo momento.

Cuando hablamos de factoring nos estamos refiriendo a un servicio que ofrecen cada vez más empresas financieras y entidades bancarias, y que se basa en la cobertura del riesgo de insolvencia o retrasos en los pagos de tus clientes, a través del anticipo de tus facturas por parte de una empresa intermedia, que te aportará el montante de dicha factura, menos una comisión, a la espera del cobro efectivo de la misma en el plazo acordado.

Si bien esta comisión suele rondar el 3%, en función de la entidad elegida para su realización, las funciones del factoring no solamente se limitan al anticipo de los cobros pendientes, sino que también es muy útil si te encuentras ante alguno de los siguientes supuestos:

  • Imposibilidad de realizar un seguimiento adecuado de la gestión del cobro de las facturas pendientes, que se verá reducida por el hecho de que este derecho pasa a ser cedido a la entidad crediticia.
  • Asunción de riesgos en caso de posibles casos de retrasos o morosidad, lo que invita a reducir esta exposición cediendo a la entidad financiera tus derechos de cobro.
  • Asunción del riesgo asociado a modificaciones considerables en el tipo de cambio de divisas, cuando la operación comercial se ha realizado en otra moneda.
  • Necesidad de asesoramiento jurídico, financiero y comercial sobre las distintas alternativas para gestionar el cobro de facturas pendientes.

 

Por tanto, el factoring, en sí mismo, pasa por ser una más que interesante fuente de financiación para las empresas, y sobre todo para autónomos y pymes, ya que la garantía para la obtención de recursos residirá en tus derechos de cobro sobre tus clientes, y no en otros aspectos que pueden comprometer tu continuidad o salud empresarial en el futuro.