10 May ¿Qué puedes hacer para mejorar tu posición de liderazgo y la implicación de tus trabajadores?
Para que tu idea empresarial alcance los objetivos estratégicos planteados, garantizando así su crecimiento y consolidación, será esencial contar con una elevada implicación de tus trabajadores y que esta haya sido obtenida a partir del convencimiento de tu equipo sobre tu validez y calidad como líder y guía de vuestro proyecto en común.
En este sentido, no cabe duda de que cuanto mayor sea tu interés por conocer lo que tus trabajadores valoran realmente, e implementes medidas que repercutan en su capacidad para desarrollar su trabajo de una forma más eficaz y eficiente, estarás dando pasos de gigante para conseguir un mayor compromiso por su parte, así como un incremento de tu posición de liderazgo sobre tu equipo de trabajo.
Por eso, desde OGE Consultores, hoy queremos mostrarte los aspectos clave que te ayudarán a consolidar la generación de un clima laboral marcado por la empatía y la implicación entre todos los miembros de la organización.
Oriéntate hacia los resultados, pero valora también los esfuerzos para alcanzarlos
Si bien los números serán los que marcarán, al final del trayecto, si se han alcanzado los objetivos establecidos, no cometas el error de limitar la valoración del trabajo de tu equipo únicamente al resultado obtenido, y muy especialmente durante el proceso.
Detrás de todos los indicadores cuantitativos que te ofrecen datos sobre el desempeño de un proyecto puedes encontrar un gran volumen de información cualitativa, de enorme utilidad para incorporar posibles cambios y mantener viva la motivación de tus recursos humanos.
Desarrolla una escucha activa
Aunque está claro que, como responsable del proyecto empresarial, eres la persona que dispone de una imagen más global y aproximada del presente y futuro de tu negocio, no renuncies voluntariamente a contar con la opinión de todos aquellos que te acompañan en esta travesía y que, como tú, están centrados en lograr los mayores éxitos posibles.
El verdadero secreto en este aspecto no reside en oír a tus trabajadores, sino en escucharles y reflexionar sobre aquellos ámbitos en los que poseen una información más cercana y actualizada que tú.
No confundas acompañamiento y control
Uno de los principales errores que se observan en la gestión de equipos en nuestro país reside en que, a causa de nuestros miedos e inseguridades, corremos el riesgo de transformar nuestra labor de liderazgo en una fijación por el control de todo lo que ocurre en la entidad, dejando a un lado nuestro papel de motivadores.
Tu protagonismo dentro de la consecución de los objetivos estratégicos y operativos de tu entidad debe centrarse en acompañar el desarrollo de las tareas, no en controlar su desempeño, ya que si esto ocurre estarás limitándote a ocupar una posición pasiva que no participa activamente en el alcance de las metas propuestas.
Conoce a las personas que componen tu equipo
A partir de la exposición de los elementos anteriores, es lógico que te estés haciendo una idea sobre la importancia esencial de evitar convertir tu posición de liderazgo en una atalaya desde la que observar lo que ocurre a tu alrededor, alejado del contacto directo con las personas que te rodean diariamente en tu trabajo.
Si decides descender de esa posición de ‘falso liderazgo’ e interesarte por las motivaciones, opiniones e inquietudes de las personas que conforman tu empresa, podrás multiplicar exponencialmente tu capacidad de gestión y, a su vez, incrementar su implicación y compromiso con el proyecto del que todos formáis parte.