Desmontando mitos empresariales: El burro ‘flautista’

reflexiones empresariales burro flautista casualidad causalidad planificación estratégica OGE Consultores

Desmontando mitos empresariales: El burro ‘flautista’

Según un conocido cuento infantil, escrito originalmente en verso por el escritor canario Tomás de Iriarte en sus ‘Fábulas literarias’, un burrito deambulaba de un lado a otro de un prado buscando alguna diversión, vencido por el aburrimiento y sin saber muy bien a qué dedicar su tiempo.

En su caminar perdido se encontró, por casualidad, una pequeña flauta que un niño se había dejado olvidada, y que, gracias a su brillo, consiguió despertar su atención.

Al acercarse a olfatearla, el burrito resopló por su hocico e hizo sonar fortuitamente la flauta, emitiendo unas notas musicales.

En lugar de tomar conciencia de que su ‘pequeño y breve concierto’ se había producido únicamente por azar, el burrito empezó a pavonearse y sentirse orgulloso por haberse convertido en todo un experimentado músico, aunque nunca más volvió a conseguir hacer sonar aquella flauta.

Estamos seguros de que no es la primera vez que has escuchado esta fábula, y que en multitud de ocasiones habrás utilizado, a lo largo de tu vida, la frase más conocida y pegadiza de esta historia, “sonó la flauta”, para referirte a alguien que ha conseguido lo que se proponía simplemente por casualidad, sin ningún tipo de planificación ni estrategia previa.

Es en este punto en el que, desde OGE Consultores nos interesa aprovechar este cuento para extraer de él una lectura o moraleja empresarial, que no es otra que establecer una clara diferenciación entre ‘casualidad y ‘causalidad’.

A lo largo de tu vida profesional y empresarial, te encontrarás ante numerosas situaciones en las que observarás como personas de tu entorno, o incluso tú mismo, consigues algo inesperado por un simple golpe de suerte, sin que haya mediado ningún tipo de esfuerzo previo.

No obstante, no se puede cimentar el crecimiento, desarrollo y consolidación de un proyecto empresarial en la esperanza de encontrarnos a cada instante con un hecho inesperado que nos reconduzca por el buen camino, sin que pongamos de nuestra parte para alcanzar el éxito y conseguir mantenernos en la cima el mayor tiempo posible.

Los resultados empresariales pueden verse influidos, en mayor o menor medida, por la casualidad, pero la única forma conocida para acercarte lo más posible a la consecución de unos objetivos en los términos y el plazo esperados es a través de la búsqueda constante y diaria de la causalidad, expresada en el diseño, implementación y desarrollo de una planificación estratégica meditada.

No podemos asegurar que este aspecto pueda garantizar la consecución del éxito en tus proyectos por sí solo, pero sí que te permitirá identificar si los pasos que estás dando son los adecuados, medir tu nivel de desempeño en cada momento, identificar desviaciones de la ruta trazada y establecer todas aquellas medidas correctivas que sean necesarias para enderezar de nuevo el rumbo de tu negocio.

Solamente a través de la planificación estratégica estarás trabajando por fomentar la ‘causalidad’ de los resultados deseados y, del mismo modo, tener la capacidad de aprovechar cualquier ‘casualidad’ para transformarla en una oportunidad de aceleración de tu crecimiento a nivel competitivo y comercial.